Pasar tiempo de calidad con el Minimalismo Digital y la Fotografía Analógica | Knowledge #37
Imagen de portada por yuriwochi
¿Qué es lo primero que haces al despertar por la mañana?
Probablemente abres tu smartphone. Aunque sabemos que es un mal hábito, es difícil cambiarlo conscientemente. A menudo nos arrepentimos pensando: "Hoy también he pasado todo el día mirando el móvil...".
En esta ocasión, exploraremos el concepto de "minimalismo digital" que puede ser de utilidad para aquellos de nosotros que no podemos alejarnos de la tecnología, y explicaremos su relación con la fotografía.
El "minimalismo digital" es un concepto propuesto por el profesor Calvin C. Newport de la Universidad de Georgetown. Se refiere a un estilo de vida que busca limitar conscientemente el uso de dispositivos digitales y actividades en línea, aspirando a una vida más sencilla.
Para muchas personas modernas rodeadas de tecnología y abrumadas por la sobrecarga de información, el "minimalismo digital" puede significar una liberación mental. En resumen, se trata de utilizar la tecnología solo cuando es absolutamente necesario y, en otros momentos, centrarse en experiencias reales.
La fotografía analógica como experiencia real
Por ejemplo, la fotografía analógica es un buen ejemplo de la búsqueda de "experiencias de calidad" en el minimalismo digital. Esto se debe a que el proceso de seleccionar cuidadosamente el sujeto y tomar fotos con atención tiene un valor intrínseco. Aunque puede que no iguale a las cámaras digitales en calidad de imagen o funcionalidad, el calor y la textura únicos de la fotografía analógica, junto con el proceso desde la captura hasta el revelado, ofrecen un espacio de descubrimiento y aprendizaje para muchas personas.
Aunque puede que no iguale a las cámaras digitales en calidad de imagen o funcionalidad, el calor y la textura únicos de la fotografía analógica, junto con el proceso desde la captura hasta el revelado, ofrecen un espacio de descubrimiento y aprendizaje para muchas personas.
Además, a diferencia de las cámaras digitales o los smartphones, la fotografía analógica requiere tiempo para el revelado y permite tomar solo un número limitado de fotos. Esta limitación fomenta que el fotógrafo elija cada momento con cuidado y lo capture con aprecio. También, debido al proceso de revelado, la expectativa de ver el resultado y el valor atribuido a cada foto aumentan significativamente.
El valor de las fotos reales
Además, la fotografía analógica ofrece fotos como objetos físicos. Esta presencia material proporciona una experiencia que los archivos digitales no pueden ofrecer, convirtiéndose en una opción atractiva para los minimalistas digitales. Las fotos reales que se pueden sostener en la mano ofrecen una satisfacción diferente a la digital.
Ver fotos en papel en lugar de en pantalla puede ser una experiencia completamente diferente en cuanto a la calidez emocional que se obtiene al consumir la misma imagen.
El minimalismo digital y la fotografía analógica ofrecen una oportunidad para reflexionar sobre "lo que realmente importa". Es un proceso importante que puede llevar al autodescubrimiento y la introspección, y para las personas modernas cansadas de la ola digital, puede ser un medio para encontrar un nuevo propósito en la vida.
